Descripción
El hierro es inmóvil en las plantas.
Esto significa que las plantas no pueden desviar el hierro de las hojas viejas a las nuevas.
Por lo tanto, los síntomas de deficiencia aparecen primero en las hojas nuevas o jóvenes.
Debido a que las plantas usan hierro para producir clorofila, la falta de hierro provoca clorosis o amarillamiento de las hojas más jóvenes.
Los tallos también pueden parecer cortos y delgados.
Si la deficiencia es grave y prolongada, cada hoja nueva emerge de un color más claro que la hoja anterior.